7/27/2020 0 Comments Fraternidad y Espíritu CooperativoEn el colegio, estamos optando por una forma de aprender distinta a la que estábamos acostumbrados. No estamos hablando del aprendizaje a distancia, que ha sido un desafío que la realidad nos ha puesto por delante, sino del enfoque cooperativo del aprendizaje.
Este enfoque no nace en nuestro colegio ni en nuestra Congregación, sin embargo, encontramos en él una importante afinidad con los principios en que nos queremos formar. ¿Qué más fraterno, que reconocer en el otro un par con capacidades, conocimientos y valores que pueden nutrir mi aprendizaje y viceversa? Cooperar parece el efecto natural de reconocernos y valorarnos como hermanos. Nuestra mirada cooperativa nos impone la responsabilidad de aprender con otros, nuestra mirada fraterna nos impone el compromiso de vivir con otros, y para todos y todas. Invitamos a reconocer y fortalecer la fraternidad en nuestra “primera familia” y también hacemos un llamado a no olvidarnos de los compañeros y compañeras. El aprendizaje y el trabajo a distancia es un reto para nuestro sentido de comunidad: preocupémonos de quien no hay podido conectarse a una clase virtual o a alguna reunión, de aquel que a lo mejor necesita ayuda para entender algo o necesita algún recurso que nosotros sabemos cómo encontrar, y estemos abiertos también a lo que los otros puedan ofrecernos y hacer por nosotros. Estas últimas semanas, hemos ganado en “estar atentos” a nuestro entorno, en hacernos cargo de los demás. Ahora que viene un período de vacaciones (diferente también), sigamos conectados y atentos a lo que nuestros “hermanos” puedan necesitar. “Cuando permanezco ciego ante el sufrimiento y la fatiga de los demás, realmente permanezco ciego ante lo que podría hacerme feliz: no se puede ser feliz solo”. (Papa Francisco)
0 Comments
7/27/2020 0 Comments RESILIENCIADado el contexto universal de hoy, nos parece necesario e imperioso, continuar reflexionando en torno al concepto resiliencia, puesto que se requiere de la convicción y claridad de que no se trata solo de una palabra que escuchamos con mayor frecuencia en estos días y que resuena como eco de moda. Por el contrario, aprender y comprender su significado adquiere especial relevancia, cada vez que la adversidad arrecia, sea en cualquier época, para cualquier persona, en cualquier cultura .
Hacer consciente y desarrollar esta capacidad, permite certeza y seguridad de que tendremos la fuerza y voluntad para partir de nuevo. Que la esperanza de que saldremos más fortalecidos en el sentido de humanidad, es una realidad posible. Tanto las Ciencias Sociales como física, el arte, el idioma, Etc., se han detenido directa e indirectamente a explicar la belleza del concepto, el cual como tal, es relativamente nuevo en el idioma, a pesar de que. como capacidad, existe desde tiempos inmemoriales : “Esta palabra no se encuentra en los diccionarios castellanos, aunque se usa mucho en física y en ciencias sociales. El vocablo nos llegó desde el inglés resilience para expresar la capacidad de un material de recuperar su forma original después de haber sido sometido a altas presiones; en esa acepción, equivale a la cantidad de energía que un material es capaz de almacenar cuando la presión lo obliga a reducir su volumen, y se expresa en julios por metro cúbico. El psiquiatra infantil Michael Rutter (1970) y el neurólogo, psiquiatra y etólogo francés contemporáneo Boris Cyrulnik, inspirados en el concepto físico, introdujeron el término en psicología para denotar la capacidad de las personas de superar tragedias o acontecimientos fuertemente traumáticos. Cyrulnik, cuyos padres judíos fueron asesinados por los nazis, estudió la capacidad de recuperación de los sobrevivientes de los campos de concentración y de niños criados en orfanatos. Resiliencia es una de esas palabras de origen latino que, curiosamente, nos han llegado a través del inglés, en este caso, del vocablo resilience, que a su vez se derivó del latín resilio, -ire ‘saltar hacia atrás’, ‘volver de un salto’, compuesto a su vez por el prefijo re- y el verbo salire ‘saltar’. (http://www.elcastellano.org/) Entonces, es desde este concepto, como seres intrínsecamente resilientes, desde donde nos mantenemos confiados, enhiestos y expectantes, para cuando nos volvamos a encontrar en el saludo afectuoso, el que en un principio quizás será a cierta distancia física, pero con toda la cercanía fraterna y cargado con la alegría, la esperanza y el cariño, que hemos guardado durante este tiempo, para entregarnos sin pausas, ni micrófonos, si no en vivo y en directo. Habitualmente, damos por sentado el encuentro con nuestra familia al finalizar un día, o temprano al empezar la mañana. Esta costumbre nos lleva muchas veces a saludarnos y despedirnos rutinariamente para desarrollarnos en nuestras esferas personales.
En este tiempo, después de saludarnos, muchos seguimos juntos por el resto del día y hemos tenido que ir aprendiendo a convivir y compartir espacios. Sabemos que hay otros que han tenido que mantenerse separados para estar seguros, y precisamente en ese acto se refleja el amor. Muchos pueden haber escuchado alguna vez que el colegio es un segundo hogar, que el curso es como una familia, y que los compañeros son como sus hermanos. Esto se dice, para simbolizar el afecto, la acogida, el respeto y la cercanía que estamos invitados a vivir. Esto es fraternidad: con nuestros amigos, ser como hermanos; con nuestros compañeros, ser como hermanos; con nuestros profesores, ser como hermanos… La situación actual nos obliga a volver a nuestro primer hogar, primera familia, a volver a poner en práctica la fraternidad en la convivencia cotidiana: con nuestros padres, madres, abuelos y hermanos. La inclusión educativa depende en gran medida de la convicción que la convivencia y el aprendizaje con alumnos diversos es positivo para todo el alumnado.
Como indica Mel Ainscow (2019) uno de los pasos para la inclusión en la escuela es promover el respeto por la diferencia. En el gran desafío de construir un colegio inclusivo para todas y todos, están involucrados todos los agentes de nuestra comunidad. A nivel social, están las exigencias curriculares y ministeriales que se nos entregan como institución educativa, las cuales están apuntando a generar espacios de enseñanza para todos/as (Ley de Inclusión Escolar N° 20.845), lo que influye directamente en nuestro Proyecto Educativo y así, en la formación de los distintos funcionarios y docentes de nuestra comunidad. Del mismo modo, están presentes la diversidad del alumnado y la participación de sus familias en este proceso. En este sentido, es esencial las actitudes y opiniones de los diferentes participantes para facilitar la inclusión. Por lo que el Plan de Inclusión, surge de la necesidad de ser conscientes de estas y visibilizar la importancia de generar y explicitar objetivos comunes para llevar a la práctica este gran desafío. El colegio y familia constituyen los contextos de aprendizaje más relevantes para los niños, niñas y adolescentes; ejerciendo una gran influencia en su desarrollo. (Enciclopedia Primera Infancia. Sección familia. http://www.enciclopedia-infantes.com/familia) La interacción positiva entre estos implica conductas de cooperación, aceptación, acercamiento, coordinación y colaboración; siendo un componente decisivo en el aprendizaje social y personal de nuestros niños, niñas y adolescentes. Razón por lo cual, surge la importancia de estar informados como Comunidad frente a lo expuesto. Una de las principales tareas que tenemos como colegio es: Favorecer las actitudes hacia el reconocimiento y la valoración de la diversidad; facilitando información, rompiendo estereotipos y animando a compartir experiencias, actividades y relaciones con los todas y todos. Es aquí donde surge el interés como colegio de adherirnos al: APRENDIZAJE COOPERATIVO; impulsando la organización de equipos de trabajo para el desarrollo y el despliegue de diferentes capacidades, habilidades y competencias, experimentando así, grupos heterogéneos en el aprendizaje diario y vivencial. El objetivo es que todos/as los/as alumnos/as aprendan a conocer, a convivir y a ser, desarrollando al máximo sus posibilidades en contextos educativos y sociales inclusivos. ¿Te has fijado como un simple acto como abrir tu ventana cuando sientes tus pensamientos estancados genera una sensación placentera que te ayuda a que tus ideas vuelvan a fluir? ¿Has sentido como luego de un paseo en bicicleta o de realizar ejercicio físico logras ver la solución a un determinado problema? ¿Has logrado escribir con mayor claridad cuando pones de fondo una canción tranquila o que te gusta?. Nuestro
cerebro nos prueba a diario el poder de los distintos estímulos que lo rodean. En este boletín abriremos la reflexión hacia la estimulación cognitiva y el cuidado de nuestro principal motor: nuestro cerebro. En él radican no solo las funciones lógicas matemáticas y verbales, sino las esferas más profundas de nuestro plano emocional. Otorgar pausas activas entre nuestros bloques de estudio, consumir la alimentación necesaria para reactivarnos y realizar acciones sencillas de autocuidado y activación cerebral deben ser parte de nuestras tareas cotidianas para protegerlo. 7/27/2020 0 Comments Responsabilidad y AutocuidadoLa responsabilidad es también amor: amor por los demás y por nosotros. Tenemos la oportunidad de darnos cuenta de que, para cuidar del otro, es vital cuidar también de nosotros mismos. Somos responsables de nuestra salud y bienestar, y a eso es lo que llamamos autocuidado.
El autocuidado es una necesidad permanente. Mientras estamos trabajando,haciendo tareas, debemos procurar que nuestros espacios y herramientas sean los mejores posibles: leer con buena luz para cuidar nuestra vista, sentarnos con un buen respaldo para cuidar nuestra espalda, darnos pausas de respiro cada cierto tiempo para oxigenar nuestro cerebro, entre muchas otras muestras de cariño por nuestra persona La invitación de hoy viernes es pensar en el autocuidado en clave de recreación. Distribuyamos bien el tiempo de nuestro fin de semana para tener espacios de compartir en familia, de jugar y reír juntos; y también espacios de tranquilidad y relajo personal. A veces es también necesario poder encontrarse con uno mismo. Los talentos podemos entenderlos como un regalo, un don, algo que hemos recibido gratuitamente, y que nos permite realizar con mayor o menor facilidad distintas actividades. Nuestros talentos no son un regalo para guardar en un cajón, sino que son los ladrillos con los cuales construirnos cada vez mejores, y quizás lo más importante, para aportar a la vida de quienes nos rodean. De esta posesión nace una responsabilidad, desarrollar al máximo posible nuestros talentos, y en el caso de un estudiante, tiene en su colegio un espacio privilegiado para hacerlo a través del estudio y el aprendizaje con otros. Hoy nuestro colegio no está siendo un espacio físico, pero si estamos poniendo
nuestras capacidades, talentos y entusiasmos para seguir siendo una comunidad de aprendizaje. 7/27/2020 0 Comments RE-CREARSEPara que no se nos acaben las energías para aprender… tenemos que recargar nuestro cuerpo y nuestro cerebro. Jugar, saltar, escuchar música, conversar en familia, respirar profundamente y relajarse, son todas actividades que nos ayudan a eso. ¿Sabías que en nuestro cuerpo hay unas pequeñas partículas que nos hacen sentir bien cuando hacemos cosas entretenidas o comemos algo rico? Se llaman endorfinas. ¡Las necesitamos para que nuestro cerebro funcione bien! Ojo, que no todas las cosas entretenidas nos ayudan para esto: cuando usamos mucho el celular o una tablet, nuestro cerebro también se cansa. Las rutinas de aprendizaje de nuestros hijos e hijas, no pueden dejar de lado la posibilidad de recargar su cuerpo, nuestra mente y nuestra alma. No están de vacaciones, no todo será descanso, pero tampoco todo puede ser estudiar. Jugar, saltar, escuchar música, conversar en familia, respirar profundamente y relajarse, son todas actividades que les ayudaran a enfrentar de mejor manera el día. Estas actividades hacen que el cuerpo libere dosis de endorfinas, las cuales son capaces de combatir emociones negativas e incluso el dolor físico. Evita pasarle la tablet o el teléfono para que se entretenga, las pantallas interactivas están diseñadas para producir descargas elevadas de endorfinas, y esta sobredosis les hará más difícil disfrutar de otras cosas, llevándolos a querer más y más. Nuestras rutinas no pueden dejar de lado la posibilidad de recargar nuestro cuerpo, nuestra mente y nuestra alma. No todo es dormir… ni tampoco todo estudiar. Jugar, saltar, escuchar música, conversar en familia, respirar profundamente y relajarse, son todas actividades que nos ayudan a enfrentar de mejor manera el día. Estas actividades hacen que nuestro cuerpo libere dosis de endorfinas, las cuales son capaces de combatir emociones negativas e incluso el dolor físico. Sé moderado en el uso de pantallas interactivas, estas están diseñadas para “saturarnos de entusiasmo”, y esta sobredosis nos hace difícil disfrutar de otras cosas, llevándonos a querer más y más.
7/27/2020 0 Comments Vínculos de amistadEl estilo de comunidad que hemos construido y nos caracteriza, nos permite afirmar con certeza, que las relaciones interpersonales que se desarrollan, en numerosos casos se transforman en lazos de amistad que se arraigan hasta más allá del momento escolar.
Conducir la convivencia escolar dentro del marco de valores como, responsabilidad, fraternidad, solidaridad y respeto, no es una intención casual. Creemos que la amistad sincera y férrea, es el resultado de esta incesante lección compartida entre colegio y familia. Esta lección que se transmite desde el ingreso, que es en la infancia en la mayoría de los casos, hasta el egreso del colegio. Aquellos que se van incorporando año a año, rápidamente se adaptan al estilo familiar, el que, a pesar de ser un enorme colegio, fomente, atesora y ostenta orgullosamente. La amistad es un concepto muy común (inclusive existe un día en homenaje a ella) ya que todos necesitamos de alguien al ser seres sociales. A pesar de ser muy importante en nuestras vidas, pocas veces nos ponemos a reflexionar en torno a ella. Quizá alguna vez hemos observado que los niños tienen una gran facilidad para nombrar a alguien su amigo. En un parque se encuentran con algún niño de su edad y al salir después de media hora de juego ya lo consideran su amigo, aunque no sepan su nombre. A medida que vamos creciendo, este concepto va cambiando, no consideramos a cualquier persona nuestro amigo. ¿Qué se necesita para que alguien lo sea? De acuerdo con la RAE, lo que hace que dos personas establezcan una relación de amistad tiene que ver con la posibilidad de encontrar una cuestión en común, una afinidad. Lo anterior, puede ser el compartir algún pasatiempo, actividad, alguna vivencia o simplemente tener intereses similares. 7/25/2020 0 Comments Solidaridad, pan y aprendizajeUno de los tópicos comunes de este aislamiento ha sido aquellas cosas domésticas que hemos aprendido a hacer por nosotros mismos gracias a los tutoriales. Quizás una de las que más se ha repetido es el hacer nuestro propio pan. Ya hace tiempo, el padre Esteban Gumucio sscc. decía que el pan es más rico cuando es compartido. Con esto hacía referencia a la fortuna espiritual que emana de la solidaridad, y es
bonito ver cómo en ocasiones las familias se han reunido en torno al rito cotidiano de hacer el pan, o cómo otras lo hacen para repartirlo a sus familiares o vecinos. Si pensamos en nuestros aprendizajes, estos también son más ricos cuando los compartimos. Por un lado, nos alimenta el alma sentir que nuestras acciones pueden ayudar a otros. Al mismo tiempo, el aprendizaje se enriquece cuando todos ponemos los conocimientos y habilidades que tenemos al servicio de los demás. Queremos entender la solidaridad con profundidad. No sólo como dar al que no tiene, sino como la responsabilidad de compartir las cosas buenas que hemos recibido reconociéndonos a todos y todas como dignos de gozarlas. De esta forma la solidaridad se relaciona con la justicia y esto nos plantea al menos un par de desafíos concretos en este tiempo de condiciones especiales. 1. La redefinición de los espacios de aprendizaje nos ha empujado a adquirir nuevas destrezas y manejar herramientas con las que quizás no contábamos. No nos conformemos con sumar estas nuevas herramientas a nuestro repertorio y con aprender a usarlas. Una vez que alcancemos una nueva habilidad, compartámosla con nuestros compañeros y compañeras; si descubrimos una herramienta que facilita la comunicación y el aprendizaje, difundámosla. 2. Comuniquémonos con el compañero o la compañera que no se ha conectado y averigüemos si le hace falta algo que podamos entregarle. Por último, la invitación a ser solidarios es el llamado a no quedarnos quietos, a no descansar en nuestra comodidad, y a seguir aprendiendo, para que nuestros nuevos conocimientos puedan contribuir al crecimiento de toda la comunidad. |